Lugares Poco Conocidos para Registrarse en Tokio

Cuando vengas a Tokio, no solo podrás experimentar la cultura tradicional y las atracciones clásicas, sino también descubrir algunos lugares únicos y poco conocidos para registrarse. Por ejemplo, el Templo Gotokuji cerca de la estación de Ome está enclavado en un valle rodeado de capas de bosques, lo que brinda una sensación de tranquilidad y paz. La Calle de Librerías Jimbocho es un paraíso para los amantes de los libros, ofreciendo una variedad de libros literarios raros y publicaciones antiguas, convirtiéndola en un verdadero refugio para los entusiastas de los libros. También hay otros lugares especiales y poco conocidos esperando a ser descubiertos. Estos lugares no solo proporcionan una experiencia de viaje diferente, sino que también te permiten comprender profundamente la diversa cultura de la ciudad.

Templo Gotokuji

El Templo Gotokuji está ubicado en Setagaya, Tokio. Es un templo con una rica historia y patrimonio cultural, y también es conocido como el lugar de nacimiento del famoso 'Maneki-neko' (gato de la suerte). El Templo Gotokuji fue construido en 1480 y originalmente pertenecía a la secta Rinzai, pero más tarde se convirtió a la secta Soto en 1584. El templo es grande y sereno, y cada primavera, el área alrededor del templo se llena de cerezos en flor, creando una escena impresionante. Además, las ruinas del Castillo de Setagaya se encuentran cerca, lo que realza aún más la atmósfera histórica y cultural del área.

Calle de Librerías Antiguas de Jinbocho

Ubicada alrededor de la intersección de Jinbocho en el distrito de Chiyoda, Tokio, hay una vasta área donde se reúnen una gran cantidad de librerías, la mayoría de las cuales son librerías de segunda mano. Esta es la calle de librerías de segunda mano más grande del mundo, llena de edificios y letreros antiguos, y las aceras también están llenas de puestos de libros. Aunque el espacio dentro de las librerías es pequeño y la decoración es simple, a menudo exhiben una variedad de libros diferentes, que son muy populares entre los amantes de los libros. La conocida 'Librería Neishan' para los chinos también se encuentra aquí, vendiendo libros relacionados con China.

21_21 Design Sight

Este museo fue diseñado por Tadao Ando, inspirado en el concepto de diseño 'una pieza de tela' de Issey Miyake. Esta es una de las razones por las que se ha convertido en un 'sitio de peregrinación' para los fanáticos de Tadao Ando. El exterior del museo es discreto pero elegante, con un llamativo techo de triángulo invertido hecho de dos grandes placas de acero. Aunque el 70% del espacio total del edificio está oculto bajo tierra, grandes ventanas de piso a techo permiten la entrada de abundante luz natural, haciendo que las dos salas de exposición subterráneas sean muy luminosas y proporcionando una sensación de comodidad.

Ryogoku Kokugikan

El área de Ryogoku es un sitio histórico con el encanto del período Edo y también es un famoso lugar de reunión de sumo. En las calles y en la estación, puedes ver luchadores de sumo vistiendo yukata. Hay seis torneos principales de sumo cada año, tres de los cuales (en enero, mayo y septiembre) se celebran en el Ryogoku Kokugikan. Además, el primer piso del Kokugikan alberga un Museo de Sumo, que exhibe grabados ukiyo-e, banzuke (listas de clasificación de luchadores de sumo), delantales bordados y otros materiales relacionados con el sumo. Además de ver los combates, se anima a los visitantes a visitar el Museo de Sumo.

Santuario Nezu

Con una historia que abarca más de 1900 años, el Santuario Nezu está impregnado de una atmósfera de profundidad histórica. Su puerta roja y el salón principal emanan una belleza de historia y tranquilidad. Dentro y fuera del santuario, las azaleas están en plena floración, y la colisión de diferentes colores aporta vitalidad y energía a este lugar sagrado. Cada mayo, las azaleas de color rojo brillante y rosa florecen, añadiendo una belleza indescriptible al Santuario Nezu.

Kishimojin

Este santuario está ubicado cerca de la estación Kishimojinmae en la línea Arakawa. Es pequeño en escala pero rico en tranquilidad. El interior del santuario es simple y elegante, sin decoraciones excesivas, transmitiendo vívidamente la atmósfera solemne y tranquila de los santuarios japoneses. Frente a la puerta, hay una tienda de dulces centenaria 'Kamikawaguchiya', donde puedes degustar delicias locales, ofreciendo una experiencia cultural única.