Comience el día visitando uno de los edificios más emblemáticos del mundo: la residencia y lugar de trabajo del Presidente de los Estados Unidos. Aunque las visitas públicas son limitadas, la vista exterior desde el jardín norte ofrece una oportunidad perfecta para sacar fotos. No deje de visitar los alrededores de Lafayette Square para conocer más detalles históricos.
Diríjase a Capitol Hill para ver el Capitolio de Estados Unidos, donde se reúne el poder legislativo del gobierno estadounidense. Maravíllese con la impresionante arquitectura neoclásica y, si el tiempo lo permite, únase a una visita guiada para conocer la historia y la función de esta importante institución.
Pasee por el National Mall, un extenso espacio verde flanqueado por los monumentos y memoriales más significativos del país. Entre los lugares clave se encuentran el Monumento a Washington, el Monumento a Lincoln y el Monumento a los Veteranos de Vietnam. Cada monumento ofrece una visión conmovedora de la historia de la nación y de las personas que la forjaron.
Termine el día con una visita al histórico barrio de Georgetown. Conocido por sus calles adoquinadas, sus elegantes casas adosadas y su animada escena gastronómica, Georgetown ofrece un encantador contraste con el núcleo monumental de DC. Disfrute de una cena tranquila en uno de los muchos restaurantes de renombre y quizás de un cóctel en un bar de moda para brindar por su día de exploración.