El Obelisco de Moscú fue erigido en conmemoración de la victoria del ejército ruso sobre las fuerzas de Napoleón durante la Guerra Patria en 1814. Es una especie de respuesta irónica al Arco de Triunfo de París, ya que éste fue construido en 1805 en honor a la victoria de Napoleón en la Batalla de Austerlitz, donde derrotó al ejército ruso-austríaco.