Museo Nacional Suizo
Visitando Suiza, un país con una larga historia de civilización, puedes obtener una visión completa de la cultura suiza aquí. Al tener un Swiss Travel Pass, los visitantes pueden entrar al museo de forma gratuita y también obtener un iPad con explicaciones en chino de forma gratuita (solo se requiere un depósito de 5 CHF). Cabe destacar que hay exhibiciones de las civilizaciones medievales y prehistóricas, que son realmente impresionantes.
Río Limmat
Las orillas del río Limmat son lugares excelentes para disfrutar de vistas panorámicas. Con el suave color del agua y el cielo, los edificios aquí parecen excepcionalmente hermosos. Los gansos que vuelan libremente sobre el río también forman un hermoso paisaje. Pasea a lo largo del río, admira los exquisitos edificios ribereños, observa las aves acuáticas en el lago y disfruta del tiempo agradable.
Grossmünster
El Grossmünster es completamente gratuito para visitar.
Se encuentra a orillas del río Limmat, frente a la iglesia Fraumünster. Sus únicas torres gemelas se han convertido en un símbolo de Zúrich, combinando estilos arquitectónicos románico, gótico tardío y neogótico.
Zurich Old Town
El casco antiguo está bien conservado, ofreciendo una visión de la atmósfera de una pequeña ciudad europea medieval. Hay muchos hoteles ligeramente peculiares pero a precios razonables en el casco antiguo. También abundan los cafés únicos, librerías y tiendas de regalos, lo que lo convierte en un lugar ideal para una visita en profundidad.
Bahnhofstrasse
Bahnhofstrasse es una de las calles más ricas del mundo.
Es un santuario para marcas de renombre mundial, donde se pueden encontrar casi todas las marcas y productos de lujo que puedas imaginar. Los productos están exquisitamente elaborados y son de calidad superior. Si tienes la suerte de encontrar una venta, los descuentos en muchas grandes marcas pueden ser increíblemente bajos.
Callejón de Augustine
El Callejón de Augustine es una calle rica en historia local, bordeada de exquisitos edificios históricos a ambos lados del camino adoquinado, todos adornados con banderas suizas, exudando una atmósfera romántica y nostálgica.
Hoy en día, estas coloridas casitas se han transformado en tiendas de artesanía altamente creativas, cafeterías, librerías y más. Si tienes suficiente tiempo, vale la pena dar un buen paseo por aquí.